China se opone a que cualquier país permita la visita del Dalai Lama, afirma el Ministerio de Asuntos Exteriores

PEKÍN, 22 de agosto - El gobierno chino ha declarado su firme oposición a cualquier nación que acoja al Dalai Lama, independientemente de la razón, anunció el jueves pasado un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino. Representantes de alto nivel tanto del Departamento de Estado de Estados Unidos como de la Casa Blanca se reunieron con el Dalai Lama en Nueva York el miércoles, durante la cual confirmaron la dedicación de Estados Unidos a apoyar los derechos humanos del pueblo tibetano, según un anuncio del Departamento de Estado. Se esperaba que la conversación con el exiliado espiritual tibetano de 89 años molestara a China, que lo considera una seria amenaza separatista y desalienta cualquier interacción con él por parte de funcionarios extranjeros. Durante una conferencia de prensa habitual, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Mao Ning, informó que China había presentado severas quejas contra Estados Unidos. "No permitimos que el Dalai Lama participe en actividades políticas separatistas en suelo estadounidense", afirmó Mao Ning. Anteriormente, China expresó una vehemente objeción contra una nueva legislación estadounidense aplicada por el presidente Joe Biden, que presiona a Pekín para que aborde las cuestiones relacionadas con la búsqueda de una mayor autonomía por parte del Tíbet, al tiempo que promete proteger firmemente su soberanía. El ministerio también ha criticado a Estados Unidos por el nombramiento de lo que llama un coordinador especial para las cuestiones tibetanas, calificándolo de intromisión en sus preocupaciones internas.