¿Qué es un genocidio?

El surgimiento del término genocidio tiene lugar en el año 1943 por el abogado judío polaco, Raphael Lemki. La palabra está compuesta a partir de 2 fragmentos: del griego genos, que significa grupo familiar, y el sufijo -cida o -cidio, que proviene del latín y significa que mata o extermina. (Sebastiá, 2020)

Su definición se encuentra plasmada en dos de los instrumentos jurídicos internacionales más importantes: la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948 y el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional de 1998. Ambas tipifican el delito de genocidio como:

Cualquiera de los actos mencionados a continuación, perpetrados con la intención de destruir total o parcialmente a un grupo nacional, étnico, racial o religioso como tal: a) Matanza de miembros del grupo; b) Lesión grave a la integridad física o mental de los miembros del grupo; c) Sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial; d) Medidas destinadas a impedir nacimientos en el seno del grupo; e) Traslado por la fuerza de niños del grupo a otro grupo. [1]

Es de suma importancia señalar, previo a mostrar algunos casos históricos de genocidio, que el tipificar y proceder jurídicamente mediante este delito posee un alto grado de complejidad. Además de tener que comprobarse la intención de cometer genocidio, se deben cumplir con las características específicas antes mencionadas en un contexto de crímenes de lesa humanidad.

Principales crímenes de genocidio en la historia internacional

A pesar de no ser el suceso más distintivo referente a esta concepción, el genocidio armenio es una de las primeras representaciones históricas de la erradicación poblacional sistemática. Previo a la Primera Guerra Mundial, la población armenia era mayor a dos millones de personas en el Imperio otomano, sin embargo, para el año 1922, quedaban menos de 400 mil. Alrededor de un millón y medio fueron asesinados en masa por tropas otomanas, posterior a largas campañas de desprestigio hacia los armenios orquestadas por las autoridades del Imperio, las cuales declararon a los armenios como una amenaza para la seguridad nacional. (Sadurní 2021)

Por otro lado, tenemos el caso más reconocido a nivel global: el Holocausto, que tuvo lugar en la Segunda Guerra Mundial. En este evento histórico, la Alemania nazi, entre 1933 y 1945, buscó erradicar a los judíos europeos. Seis millones de miembros de la comunidad judía fueron asesinados. Dicho suceso trae consigo la instauración del término genocidio como descriptivo para plasmarse en los instrumentos jurídicos con una connotación legal en 1998.

Asimismo, es necesario mencionar el caso del genocidio en Ruanda que se perpetró en 1994. A pesar del trasfondo histórico extenso, este suceso solo requirió 3 meses para cobrar la vida de aproximadamente 1 millón de personas de manera sistemática. El genocidio se abrió camino tras años de promoción del odio a través de discursos, campañas, segregación cultural y étnica. Las facciones extremistas hutus desencadenaron una matanza sin precedentes, en menos de 100 días el 80% de la comunidad tutsi fue exterminada a manos de los machetes de la población civil bajo las instrucciones de la Radio Televisión Libre de las Mil Colinas, así como de las esferas gubernamentales y militares. (Museo Memoria y Tolerancia, s.f.)

Finalmente, uno de los casos más recientes consiste en el genocidio rohingya en Myanmar en 2016. La operación de "limpieza étnica" se llevó a cabo por el ejército, la policía y civiles de mayoría budista de Birmania, contra los musulmanes rohingya en el estado de Rakáin, al noroeste del país. Estas acciones fueron calificadas de genocidio por la Organización de las Naciones Unidas, contabilizando un saldo de alrededor de 725,000 personas desplazadas por la violencia y 25,000 fallecidos. A pesar del conocimiento por parte de la comunidad internacional de estas atrocidades, desde el golpe militar de febrero de 2021 en Myanmar, la población rohingya se ha mantenido como la más vulnerable y marginalizada del país. (EFE, 2018; Reuters, 2018)

Instrumentos y medios jurídicos para la sanción de genocidio

Como se mencionó con anterioridad, existen dos instrumentos principales para prevenir y sancionar el genocidio: la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948 y el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional de 1998. Los crímenes de genocidio, lesa humanidad, guerra y agresión pertenecen a los más graves y de trascendencia para la comunidad internacional, motivo por el cual son competencia de la Corte Penal Internacional. Estos crímenes son sometidos a juicio por parte de la instauración de Tribunales Especializados. (Corte Penal Internacional 1998)

Para ejemplificar lo anterior, como consecuencia del genocidio en Ruanda, el Consejo de Seguridad de la ONU creó un Tribunal Penal Internacional Especializado, en el cual, entre 1994 y 2016, el tribunal acusó a 93 personas y condenó a 62 de ellas por el delito de genocidio, incitación al genocidio y otros crímenes. (Blakemore s.f.)