La geopolítica de la vacunación: México y Argentina

La llegada del presidente argentino – Alberto Fernández – a México el pasado 22 de febrero, con una agenda que incluye visitar la fábrica de envases de vacunas contra el COVID, representa el fortalecimiento de la relación entre ambos países. Tras el comienzo de la pandemia en 2019, la cooperación internacional y el multilateralismo han retomado fuerza en el escenario internacional en consecuencia a la emergencia sanitaria, cuestión que se pretende aumentar en la región y es apoyada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe con la geopolítica de la vacunación empleada por AMLO y Fernández.

La invitación que extendió el presidente Andrés Manuel López Obrador lleva inmersa la búsqueda por una relación bilateral, regional y en materia de desarrollo tecnológico, pues en el último caso, se trabaja de manera conjunta por parte del laboratorio mexicano AstraZeneca y el argentino mAbxience en la creación de recipientes que puedan envasar la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford. [1]

El virus a nivel mundial ha traído repercusiones en las economías de los países más afectados, entre la región latinoamericana se encuentran México y Argentina, los cuales han presentado dificultades en cuanto al manejo de la pandemia y específicamente en la estrategia de vacunación. Se han realizado diversas acusaciones que apuntan al privilegio de adquirir la vacuna, pues se ha demostrado que tanto en el país norteño como en el sureño, la repartición de fármacos ha sido de manera inequitativa al focalizarse en las élites sociales que cuentan con la posibilidad de pagar para conseguir con mayor rapidez la vacuna.

La concentración de los fármacos en los países más desarrollados es una de las causas por las que México es actualmente uno de los países con mayor número de muertes aunado al mal manejo de la situación. Dicha cuestión, se denunció en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en respuesta a la acumulación del 80% de las vacunas a nivel mundial en únicamente 10 países que puede analizarse como un nacionalismo en materia de salud, por lo que se planteó la invitación al repartimiento equitativo de los fármacos. [2]

Ante el abuso en el acaparamiento de las vacunas, se crearon algunas iniciativas que buscan el acceso de países que no tienen el poder adquisitivo para conseguirlas como la COVAX creada por la Organización Mundial de la Salud. Se pretende distribuir el mayor número de sustancias posibles con objeto de detener las afectaciones económicas causadas por la pandemia. [3]

Por otra parte, en Argentina de igual manera se presentan casos como las “Vacunaciones VIP” en donde los allegados como familiares, amigos y principales socios del sector encargado de repartir las vacunas de manera esquematizada en respuesta a los casos más necesitados son suministrados con la vacuna como objetivo primordial, cuestión que no ha sido comentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador al no emitir ningún posicionamiento ante tal circunstancia.

En este eje, la visita del presidente Alberto Fernández a México convoca a una serie de interrogantes inmersas en ¿Qué representa el acercamiento? ¿Se espera mayor cooperación bilateral? ¿La relación México – Argentina afectará al resto de América Latina? ¿Las vacunas creadas podrán satisfacer la demanda de una sociedad enferma? ¿Qué repercusiones geopolíticas habrá?

México: Principales afectaciones

Posterior al comienzo de la pandemia en 2019, el mandatario Andrés Manuel López Obrador sostenía que la política exterior se medía en función de la política interna, por lo que en primera instancia su gobierno se enfocó principalmente en la resolución de problemáticas de México. Con el avance de la pandemia, la cooperación internacional se volvió fundamental dentro del marco de multilateralismo para conseguir el desarrollo de soluciones que pudiesen atender a la emergencia mundial, por lo que el país se vio en la necesidad de adentrarse en la dinámica.

Lamentablemente, el manejo adecuado de la pandemia fue demasiado tardío. La actuación de AMLO inicialmente resultó de incredulidad, seguida por la falta de decisión para declarar cuarentena y consecuentemente el confinamiento, por lo que los sectores más afectados de la población son hasta el momento los trabajadores y trabajadoras del sector informal.

Por otra parte, la forma en la que los gobiernos reaccionaron a la situación es diferente en demanda a la realidad social a la que responden, puesto que en México gran parte de la población sufre de precariedad laboral que conlleva la implementación del trabajo informal. Este aspecto de la sociedad mexicana no se debe a un pasado reciente, sino a los procesos políticos por los que ha atravesado el país y que se han visto afectados mayormente en los últimos tiempos.

Tasa de informalidad laboral trimestral (Porcentaje de la población ocupada). Fuente: Organización Internacional del Trabajo con base en INEGI de 2008 a 2020. [4]

En esencia, los casos confirmados en México por coronavirus son de 2, 137, 884 según datos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología a comparación de los 2, 192, 025 en Argentina. En contraposición, el número de muertes entre ambas naciones es abismal dado que en el primer caso son alrededor de 194, 490 a diferencia de los 53, 646 en Argentina. [5] [6]

Esto indica que, a pesar de tener una cantidad relativamente igual en los casos confirmados, las muertes han tenido diferentes impactos. Frente al contexto, el país territorialmente norteamericano sostiene un mayor impacto en materia humanitaria, económica y social a comparación de Argentina.

A pesar de las circunstancias, México ha comenzado a recibir las 34 millones de vacunas acordadas con la empresa Pfizer, con AstraZeneca 77.4 millones, con Cansino 35 millones y 51.5 millones por parte de la COVAX. Se pretende realizar la segunda jornada de vacunación con las sustancias recién llegadas. [7]

Dentro del escenario pandémico actual, las dos naciones con gobiernos izquierdistas aparentemente se han colocado a la cabeza dentro de la región con la asociación que están creando para la vacunación de América Latina. Argentina por su parte recibió una carga de la vacuna rusa Sputnik V, aunque posteriormente las alianzas con otras farmacéuticas se dieron en consecuencia con mAbxience.

Argentina: El caso abierto

El país sureño por su parte, desde que comenzaron a presentarse los primeros casos ha actuado con mayor serenidad y rapidez puesto que a las dos semanas de haber iniciado la emergencia sanitaria, se declaró el aislamiento social progresivo como medida preventiva para evitar el aumento de los contagios. Esto causó diversos impactos en la población en ámbitos como la educación, el trabajo y pérdidas humanitarias. [8]

Conforme al desarrollo del virus, se creó una curva bimodal en cuanto al número de contagiados en el sistema. Ante ello, se argumenta que no se realizaron las pruebas correspondientes en el debido tiempo que podrían haber evitado el incremento en el número de infectados ni tampoco se realizó un seguimiento a los casos que ya se habían detectado con objetivo de separarlos de la población sana.

En suma a la implementación del aislamiento, se planteó un programa estratégico para el suministro de vacunación similar al que mantiene México en el cual se medica en principio a la primera línea referente al personal hospitalario, seguida por las personas de la tercera edad mayores de 65 años y evolutivamente descender entre la población hasta llegar a la más joven.

A este contexto, la vacuna que se esperaba utilizar era Sputnik V a partir de marzo, no obstante, a raíz de la tardanza en dicha cuestión se buscó una forma de agilizar el proceso mediante la visita a México del presidente Fernández, la cual si bien había sido originalmente para participar como invitado especial en la conmemoración del Bicentenario de la Promulgación de Iguala y del Día de la Bandera, también se había utilizado para realizar un recorrido en las instalaciones donde se formularán y envasarán las vacunas. [9]

La alianza para la producción del antígeno con el país en la planta de laboratorios Liomont propicia un esfuerzo conjunto por la creación de una sustancia que satisfaga las necesidades no solamente de ambos países sino de Latinoamérica en general para colocarse a la cabeza como las principales economías en el continente, debajo de Estados Unidos.

¿Esta alianza es la esperanza de América Latina?

La visita del presidente argentino a México implica repercusiones geopolíticas puesto que más allá de ser una relación bilateral en la que se reafirmó el Acuerdo de Asociación Estratégica que involucraba la participación de las comisiones de Asuntos Políticos, de Cooperación, Económicos, Comerciales e Inversión, es una apuesta por el futuro de la salud pública en el continente, misma que se planea impartir a través de la asistencia humanitaria internacional.

Dado que la pandemia ha causado grandes estragos en la región, en ámbitos laborales, humanitarios y económicos, específicamente en el sector informal como el más vulnerado, en adición a la contracción monetaria del -7.7% en la caída del PIB que presentó la región en 2020 según datos de la CEPAL, se busca crear una relación por medio de foros como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños o el G20 para la cooperación y recuperación, sumando esfuerzos que involucren la gestión de próximos riesgos epidemiológicos y naturales en virtud de mejorar la adaptación ante los fenómenos que pueden presentarse.

En términos generales, las economías más dañadas han sido Venezuela con la caída del PIB en -30%, Perú con – 12,9%, Panamá con -11%, Argentina con -10.5%, México con -9% y Ecuador con -9%. Ante lo expuesto, resulta necesario adoptar mayor control sobre la pandemia en relación con la mortandad, para así reducir el número de pérdidas humanas y tener la capacidad para reactivar la economía de las naciones en cuestión.

Por otra parte, la inevitable dependencia hacia la economía estadounidense principalmente de México y Centroamérica han causado mayor recesión puesto que el país norteamericano por sí solo ha sufrido grandes impactos desde el comienzo que afectan a manera de domino a los países que guardan vinculación económica. En contraposición, América del Sur muestra una mayor dependencia con China en respuesta a la relación como principal socio que mantienen desde 2015. [10]

La integración regional es uno de los puntos clave que se plantean dentro de la lógica para la reconstrucción económica – comercial mediante el diálogo político y la cooperación para así lograr la capacidad en la producción de vacunas y que, a su vez, se denominen “bienes comunes globales”, puesto que pertenecen al plano internacional y deberían poder llegar a todas las zonas del mundo a un precio asequible. [11]