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Análisis

Celeste Jiménez

La postura de México frente al virtual triunfo de Joe Biden. Supervivencia del Estado y posicionamiento político.

- Después de una cerrada elección y un conteo de votos que llevo varios días, era de esperarse que Donald Trump rechazara el resultado e incluso anunciara que llevaría a litigio este.

La postura de México frente al virtual triunfo de Joe Biden. Supervivencia del Estado y posicionamiento político.

En una especial y característica contienda por la presidencia de Estados Unidos este 2020, el triunfo del virtual candidato ganador, Joe Biden, se ha visto envuelto en una disputa política interna; en medio de acusaciones de fraude por parte del todavía presidente norteamericano, Donald Trump, y de manera contrastante, mostrando un fuerte respaldo a su posible victoria desde varios grupos de poder, que incluyen tanto a demócratas como a republicanos, e incluso al poder empresarial y de los medios masivos de comunicación.

Después de una cerrada elección y un conteo de votos que llevo varios días, además de la declaración del presidente Donald Trump de la probable ejecución de un fraude electoral, que de hecho, fue censurada por las cadenas televisivas más importantes a nivel nacional; el pasado 07 de noviembre se anunció en los medios masivos de comunicación norteamericanos que el candidato, Joe Biden, habría alcanzado los 270 votos electorales que le aseguraban el triunfo en la campaña presidencial estadounidense. Era de esperarse que Donald Trump rechazara el resultado e incluso anunciara que llevaría a litigio este, al tiempo de hacerse oficial.

De acuerdo con el proceso electoral norteamericano, los resultados virtuales de esta contienda pasan a ser de carácter oficial después del próximo 14 de diciembre, fecha en que los electores del Colegio Electoral Norteamericano emitan oficialmente su voto por alguno de los candidatos, es en ese momento, en que puede expresarse legalmente, por alguna de las partes, el descontando con los resultados, y entonces comenzaría un litigio que debiera resolverse en el mejor de los casos antes de enero de 2021, fecha en que debe tomar posesión del cargo, el nuevo presidente de Estados Unidos. [[1]]

Pese a que quedan algunos pasos por dar y un camino de más de dos meses con Donald Trump a la cabeza de la Casa Blanca, lo cierto es que el virtual triunfo de Joe Biden ha sido ya reconocido por gran parte de los actores del Sistema Internacional, otros jefes de Estado se han apresurado a extender sus felicitaciones al candidato y a festejar la salida del poder de un personaje como el actual presidente estadounidense. Sin embargo, no ha sido este el caso de México; el presidente Andrés Manuel López Obrador ha declarado que la felicitación llegará cuando los resultados se hagan oficiales, a fin de evitar tomar partido en un conflicto exclusivo de los estadounidenses, apegándose así a los principios de Política Exterior Mexicana, de No Intervención y Libre Determinación de los Pueblos.

Esto último ha causado especial controversia tanto a nivel internacional como hacia dentro de los límites mexicanos, la oposición en México ha tomado la elección norteamericana como bandera para afianzar algunos movimientos y argumentos en contra del poder oficial; desde la discusión en torno al derecho de los medios de comunicación de censurar al presidente, hasta los argumentos que lo acusan de cometer el error diplomático más grande en lo que va de su sexenio, aludiendo a una posible relación o convenio personal con su homólogo estadounidense, o comparando esta situación con el reciente recibimiento en territorio nacional de Evo Morales, ex presidente de Bolivia, en carácter de asilado político, caso en el que aseguran, la diplomacia mexicana tomó partido.

Aunque fuera de la situación política interna en México, de las intenciones de la oposición, o incluso de los intereses que puedan existir en el Escenario Internacional en torno a la dirección política de los Estados Unidos; lo cierto es que la decisión del Estado mexicano de no felicitar, aún, al virtual candidato ganador de la elección presidencial en el país vecino, responde a una lógica mucho más compleja que un error diplomático o algún interés personal del ejecutivo. Esta postura es resultado del deseo de posicionamiento internacional de México, trabajado ya desde varios frentes en el presente sexenio, que se ve respaldado además por una lógica histórico-constitucional de apego a solidos principios de Política Exterior y que responde también al manejo estratégico de la relación geopolítica más importante para el país, a fin de garantizar siempre las mejores condiciones posibles con la potencia mundial con la que se comparten mayores intereses.

A fin de sostener esta postura y comprobar que esta posición diplomática no sólo garantiza para México el desarrollo cómodo y tranquilo de su relación con Estados Unidos de aquí al momento de la transición presidencial en dicho país, sino que apoya su posicionamiento en el Sistema Internacional, ayudándolo a marcar la fortaleza de sus principios de Política Exterior y perfilándolo nuevamente como líder de la región Latinoamericana; vamos a proceder a analizar algunos elementos concretos de la situación para revisar a fondo la lógica de esta polémica decisión.

El contexto y los actores.

En este apartado se revisarán los actores más relevantes en la generación de la polémica y el contexto al que responden al momento de su ejecución, si bien es cierto, que en la teoría los agentes más importantes serían los directamente involucrados, candidatos y figuras presidenciales, lo cierto es que los medios de comunicación y los grupos de oposición al poder oficial, en el particular caso de México, son quienes han dado mayor relevancia al caso.

Donald Trump: El papel de Donald Trump es probablemente el más significativo en la polémica de la elección estadounidense, pues es él directamente, quién ha acusado de fraudulento al proceso, quién desconoció el resultado preliminar y quién insiste en llegar al litigio, una vez le sea permitido, esto en su posición de candidato. Por otro lado, está su postura como actual presidente de los Estados Unidos, que aunque, como se ha podido ver, no le garantiza poder absoluto sobre la potencia, sí le permite conducir sus caminos al menos hasta el próximo enero de 2021.

Joe Biden: El virtual ganador a la presidencia de Estados Unidos se ha mantenido cauteloso y en una posición políticamente correcta ante el triunfo, ha recibido y aceptado las felicitaciones de un gran número de representantes de otros Estados, así como ha declarado abiertamente antes y después, su deseo de cooperar con México. Cuenta, evidentemente, con el respaldo de la comunidad internacional y con los grupos de poder más importantes en su propio país, por lo que pese a la complicada situación que se presenta, claramente se perfila como el próximo presidente de Estados Unidos, con todo el poder que eso conlleva.

Andrés Manuel López Obrador: Cómo representante oficial de uno de los principales vecinos de Estados Unidos y como quién será presidente de este, tanto durante los últimos meses del mandato de Donald Trump como durante todo el periodo presidencial de Joe Biden, ha declarado únicamente que es respetuoso del proceso electoral norteamericano, que no tiene conflicto ni particular afinidad por alguno de los candidatos y que esperará a que el resultado sea oficial para que su felicitación al ganador entre en el marco de la prudencia.

“Vamos a esperar que se terminen de resolver todos los asuntos legales, no queremos ser imprudentes, no queremos actuar a la ligera, queremos ser respetuosos de la autodeterminación de los pueblos y el derecho ajeno” [[2]]

Actores Internacionales: En este apartado, nos referiremos como actores internacionales únicamente a los jefes de Estado o jefes de Gobierno que han tenido relación directa en la polémica del reconocimiento de los resultados de la elección estadounidense; en el contexto, es evidente que el respaldo de la comunidad internacional lo tiene Joe Biden, ya que no sólo ha sido reconocido y felicitado como el nuevo presidente de Estados Unidos, sino que cuenta con la simpatía de la mayoría de los representantes oficiales del Sistema Internacional.

Prensa norteamericana: Es importante resaltar también el apoyo concreto y directo de los grupos de poder estadounidense hacia el virtual candidato ganador, mismo que se ha reflejado en la declaración oficial y absoluta de su triunfo en los medios masivos de comunicación y la censura al presidente en turno en su reclamación de fraude. Lo que deja claro que no hace falta que ningún otro actor anticipe su respaldo, pues tanto internamente como a nivel internacional, las posturas son claras.

Oposición mexicana: Pese a que la decisión mexicana no tiene un impacto trascendente ni sobre el proceso interno en los Estados Unidos, ni sobre la futura relación entre Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador; y sí lo tiene sobre la actual relación bilateral y sobre las posiciones que marca México en el mundo; la oposición mexicana ha decidido hacer de este tema una discusión nacional, y acusar al poder oficial, sin ninguna base de Política Exterior o Diplomacia, de cometer el más grande error estratégico, comparándolo con procesos absolutamente distintos, como el de Bolivia. Mismo donde habría que recordar que no se dudaba del resultado sino de los porcentajes, que se pensó en realizar un segundo proceso y que finalmente se recurrió a la legitima figura del asilo político por un conflicto que sobrepasó los límites de la confrontación electoral, además de considerar también las evidentes diferencias geopolíticas.

La intención de hacer de este un tema en la discusión nacional, se debe en gran parte a un desgaste de la propia oposición, a su falta de claridad en el rumbo a tomar y a la evidente necesidad de polemizar todas las decisiones del poder oficial.

Los canales y las posiciones

Como ya ha quedado claro, nos enfrentamos alrededor de la polémica postura de México a dos escenarios distintos. El que presentan los canales no oficiales, como la prensa nacional mexicana y en general los grupos de oposición, mismos que han exacerbado el impacto internacional de la postura oficial y que se han esforzado por alterar las declaraciones a fin que parezcan un conflicto entre Joe Biden y López Obrador, o el terrible error diplomático que han querido proyectar.

Y el verdadero escenario bilateral e internacional, dónde lo único a lo que se ha aludido por parte del Estado mexicano es al respeto a la soberanía, en el que la postura sí ha causado controversia en el Escenario Internacional, pero por posicionar claramente ciertos principios de Política Exterior, y dónde los canales acreditados para hacerlo, en este caso el presidente Andrés Manuel López Obrador, el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrad, y la Embajadora de México en Estados Unidos, Martha Bárcena, sólo han expresado respeto a los procesos internos del país vecino.

“México considera que emitir opiniones, comentarios o posiciones respecto a procesos internos puede ser considerado como intervencionista” [[3]]

Respaldo histórico-constitucional y Coyuntura

Es importante entonces, para sostener esta tesis, dejar claras las razones histórico-constitucionales que respaldan la posición de México frente al virtual triunfo de Joe Biden y la coyuntura específica del presente régimen de gobierno que ha pretendido desde que tomo posesión, rescatar el discurso oficial de Política Exterior y los principios que son constitucionales desde 1988. Siguiendo este marco, habría que establecer en primera instancia que lo que México ha hecho de ningún modo es un desconocimiento, pues:

“México no se pronuncia en el sentido de otorgar reconocimientos, porque considera que ésta es una práctica denigrante que, sobre herir la soberanía de otras naciones, coloca a éstas en el caso de que sus asuntos interiores puedan ser calificados en cualquier sentido por otros Gobiernos, quienes de hecho, asumen una actitud de crítica, al decidir, favorable o desfavorablemente, sobre la capacidad legal de regímenes extranjeros.” [[4]]

Antes bien, la postura de México ha sido de absoluto respeto a la soberanía estadounidense, evitando tomar algún tipo de partido en un conflicto que debe ser resuelto solo internamente.

“la igualdad, el mutuo respeto a las instituciones y a las leyes, y la firme y la constante voluntad de no intervenir jamás, bajo ningún pretexto, en los asuntos interiores de otros países… procurando al mismo tiempo obtener… un tratamiento igual al que otorga, esto es, que se considere Nación Soberana…, que sean respetadas sus leyes y sus instituciones y que no se intervenga en ninguna forma en sus asuntos interiores.” [[5]]

Los anteriores son preceptos establecidos en dos de las doctrinas de Política Exterior más importantes de México, utilizadas en el actuar internacional desde 1935 y base de algunos de los Principios Constitucionales más sobresalientes en esta misma área. Su uso ha sido generalizado y le ha dado al Estado la capacidad de establecer una posición sólida, defensiva, participativa y activa en el Sistema Internacional, además de facilitarle los logros más significativos en materia de diplomacia.

El actual régimen de gobierno dirigido por Andrés Manuel López Obrador, ha hecho especial énfasis en su seguimiento riguroso, a fin de rescatar estos lineamientos después de su olvido paulatino por parte de los gobiernos neoliberales de las últimas cuatro décadas; por lo que es también parte de su bandera rescatar y actuar conforme a la noble tradición histórica de su uso constitucional y recuperar así tanto el posicionamiento de México en las escena mundial como el liderazgo en su tradicional zona de influencia, Latinoamérica.

Consideraciones Finales

Una vez analizada la situación, los actores, los intereses en juego, las posiciones, y sobre todo las razones histórico-constitucionales que han llevado a México a actuar con cautela en este caso, resulta más sencillo hacer una lectura profunda de su posición y entender que el no adelantarse a la felicitación del virtual candidato ganador de la elección estadounidense, responde principalmente a tres razones de trascendencia: una histórico-constitucional, que tiene que ver con la congruencia que debe el Estado tanto a sus leyes como su noble tradición de Política Exterior, otra geopolítica, respecto a la permanencia de Donald Trump en la Casa Blanca y la necesidad de México de ser sumamente respetuoso de los procesos internos del país vecino, y una tercera de posicionamiento político que busca constantemente el régimen actual mexicano, casos de participación internacional que responden a este objetivo, hay bastantes para mencionar, su participación activa en la búsqueda de la vacuna contra el COVID-19 y su regulación en la ONU, su clara posición ante los casos de Bolivia y Venezuela, y su camino hacia el Consejo de Seguridad, son algunos.

Destacable también es el hecho de que la falta de una felicitación temprana a Joe Biden no necesariamente significa un mal comienzo con quién será el próximo presidente de los Estados Unidos, pues hay disposición de ambas partes para cooperar.

“Expuso también que el Ejecutivo federal está convencido de que la relación bilateral será tan fructífera y productiva como debe serlo. México, añadió, está listo para trabajar con el futuro gobierno de Estados Unidos de manera constructiva, con base en los lazos de amistad y buena vecindad que unen a las dos naciones.” [[6]]

Fuentes

    [1] Raquel Saed. Milenio Televisión. “¿Qué falta en el proceso electoral de Estados Unidos?” 11 de noviembre de 2020. https://www.facebook.com/mileniotelevision/videos/823041741853727 (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    [2] Andrés Manuel López Obrador citado en W Radio. “AMLO: «No queremos ser imprudentes; queremos ser respetuosos»”. 07 de noviembre de 2020. https://wradio.com.mx/radio/2020/11/05/nacional/1604594093_892291.html (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    [3] Martha Bárcena citada en el Universal. “Biden pide hablar con AMLO; aún no, responde su gobierno”. 11 de noviembre de 2020. https://www.eluniversal.com.mx/nacion/biden-pide-hablar-con-amlo-aun-no-responde-su-gobierno?fbclid=IwAR3fedWPorqq12w32i8i6TMMNpkbmspxJvQ5dzNhHv1xKcnb4N9kc02-ZFA (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    [4] Genaro Estrada citado en Gómez Robledo. “Notas sobre la Doctrina Estrada”. http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/2/644/27.pdf (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    [5] Venustiano Carranza citado en Documentos Históricos de la Revolución Mexicana XX. “Puntos de vista sobre política internacional basados en la Doctrina Carranza”. 12 de febrero de 2014.

    [6] Martha Bárcena citada en el Universal. “Biden pide hablar con AMLO; aún no, responde su gobierno”. 11 de noviembre de 2020. https://www.eluniversal.com.mx/nacion/biden-pide-hablar-con-amlo-aun-no-responde-su-gobierno?fbclid=IwAR3fedWPorqq12w32i8i6TMMNpkbmspxJvQ5dzNhHv1xKcnb4N9kc02-ZFA (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    Documentos Históricos de la Revolución Mexicana XX. “Puntos de vista sobre política internacional basados en la Doctrina Carranza”. 12 de febrero de 2014.

    El Confidencial. “Recuentos y demandas: ¿qué litigios ha presentado la campaña de Trump en EEUU?”. 12 de noviembre de 2020. https://www.elconfidencial.com/mundo/2020-11-12/recuentos-y-demandas-que-litigios-ha-presentado-la-campana-de-trump-en-eeuu_2827431/ (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    El Universal. “Biden pide hablar con AMLO; aún no, responde su gobierno”. 11 de noviembre de 2020. https://www.eluniversal.com.mx/nacion/biden-pide-hablar-con-amlo-aun-no-responde-su-gobierno?fbclid=IwAR3fedWPorqq12w32i8i6TMMNpkbmspxJvQ5dzNhHv1xKcnb4N9kc02-ZFA (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    Es la Hora de Opinar. Noticieros Televisa. “AMLO no ha felicitado a Joe Biden; ¿es un error diplomático?” https://www.youtube.com/watch?v=tI4OIeICKcs (último acceso: 16 de noviembre de 2020). Genaro Estrada citado en Gómez Robledo. “Notas sobre la Doctrina Estrada”. http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/2/644/27.pdf (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    Patricia Galeana. FFL UNAM. “La Doctrina Juarez”. http://www.revistadecires.cepe.unam.mx/articulos/art8-8.pdf (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    Raquel Saed. Milenio Televisión. “¿Qué falta en el proceso electoral de Estados Unidos?” 11 de noviembre de 2020. https://www.facebook.com/mileniotelevision/videos/823041741853727 (último acceso: 16 de noviembre de 2020).

    W Radio. “AMLO: «No queremos ser imprudentes; queremos ser respetuosos»”. 07 de noviembre de 2020. https://wradio.com.mx/radio/2020/11/05/nacional/1604594093_892291.html (último acceso: 16 de noviembre de 2020).


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