¿Qué es La Doctrina Bush?

Al finalizar la Guerra Fría en 1989, el sistema internacional pasó de ser uno bipolar a uno unipolar, en el cual, Estados Unidos pasó a tener la hegemonía. Sin embargo, después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, el sentimiento estadounidense cambió por completo al
ser la primera vez que sufrían un ataque dentro de su territorio. Debido a ello, Estados Unidos cambió su política exterior hacia una enfocada en combatir al terrorismo.

Dicho redireccionamiento de política exterior y seguridad se materializó en la Doctrina Bush, la cual “supone la ruptura definitiva con los principios multilaterales que guiaron a Bill Clinton y a George Bush padre, y enlaza, en cierta forma, con la idea del 'imperio benigno' establecida por Ronald Reagan” (González, 2002, par. 4). La doctrina fue nombrada así ya que fue durante el mandato del entonces presidente de Estados Unidos, George W. Bush., en el que surgió el documento de seguridad nacional.

La doctrina se basa en la guerra preventiva, la cual se refiere a la “utilización de la fuerza frente a meras sospechas de posibles ataques” , aunado al derecho de la autodefensa en los casos que se consideren justos . Asimismo, el documento por el cual se le conoce a la Doctrina Bush se titula La nueva estrategia de seguridad nacional de Estados Unidos, el cual fue publicado en septiembre del 2002. Cabe destacar que “el borrador, redactado por la asesora de seguridad nacional, Condoleezza Rice, era mucho más duro”

Los principios de la doctrina se basan en cuatro pilares fundamentales: “el mantenimiento de la primacía militar estadounidense; la adopción de la guerra preventiva como complemento a la disuasión tradicional; la guerra contra el terrorismo; y democratización” . Tales principios
se expresaron en un artículo de El País, en el que Bush proclamó que, la estrategia de seguridad

Se basará en un internacionalismo típicamente americano que refleja la unión de nuestros valores y nuestros intereses nacionales'. El texto establece, de forma oficial, que Estados Unidos está por encima de instituciones internacionales como la ONU: trabajará con ellas, pero sin sentirse obligado a seguir sus instrucciones ni a respetar sus acuerdos, que sí rigen para el resto de los países.

Buckley (2006) menciona que “la enunciación de esta doctrina generó una controversia internacional intensa y generalizada” . Debido a la misma premisa de la Doctrina Bush, la mejor defensa es el ataque, Estados Unidos se enfrentó a Rusia, China, Alemania y a otros más para llevar a cabo la
invasión a Irak por una presunta posesión de armas de destrucción masiva. En este sentido, Bush manejó una agenda meramente unilateral argumentando de que había evidencia de vínculos con Al Queda, ya que Saddam tenía armas de destrucción masiva. Sin embargo, incluso antes de
la invasión, había pruebas de que dichas declaraciones eran falsas, pues de acuerdo con el Inspector en jefe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la tecnología de detección demostró que en realidad Irak no poseía armas nucleares. Otro ejemplo fue la invasión a Afganistán .

Asimismo, cabe destacar que una de las críticas del enfoque de la doctrina Bush era uno más bien arbitrario, ya que de acuerdo con Caro (2006), Estados Unidos promovía acciones militares sólo contra algunos países de los que poseen o se presume poseen armas de destrucción masiva”, estos países se les conoce como el “Eje del Mal”, que comprenden a los países de Irán, Irak y Corea del Norte. Otra crítica es acerca de su carácter aislacionista, pues se destaca el abandono de Estados Unidos del
Protocolo de Kyoto, del Tratado de Misiles Antibalísticos que tenía con Rusia, su negación a firmar el tratado que establece la Corte Penal Internacional, etcétera.

Finalmente, se concluye que la doctrina Bush no fue una de las razones por las que Estados Unidos siguió interviniendo o injiriendo en la soberanía de otros Estados. Se percibe una política exterior bastante activa en la arena internacional al finalizar la Segunda Guerra Mundial.

Durante la Guerra Fría, la política estaba enfocada en evitar la expansión del comunismo y la influencia soviética. En el siglo actual, la razón es combatir el terrorismo, escudándose con un fuerte discurso de seguridad nacional que justifica acciones de alguna forma u otra xenófobas. Todo ello sólo atribuye a pensar en Estados Unidos cómo, de nueva cuenta, “la policía del mundo”.